Hardware

Requerimientos para un PC de edición con DaVinci Resolve

Anteriormente hablamos sobre los requerimientos mínimos y recomendados para editar vídeos de forma fluida con Premiere. En esta ocasión, le toca el turno a DaVinci Resolve, por lo tanto, en este tutoblog te voy a dar a conocer todos los componentes necesarios para que tu PC pueda trabajar correctamente con DaVinci.

Si bien no va a haber mucha diferencia en cuanto a la relación de que a más potencia mejor, DaVinci sí que nos va a permitir ser más flexibles en cuanto a componentes y presupuesto se refiere, pero para ello, vamos a tener que pensar muy bien con qué tipos de archivos vamos a trabajar principalmente.

Postproducción audiovisual
con Davinci Resolve

Domina las áreas de la postproducción
con el mejor programa para etalonaje

Hemos hablado directamente con BlackMagic para ver si nos podrían dar unas recomendaciones. Desde su punto de vista, no hay una recomendación óptima, por lo mismo que te acabo de decir, al final, depende de muchos factores de tu flujo de trabajo. Pero sí que nos han dado unas pautas mínimas tanto para ordenadores de sobremesa como para portátiles, y estamos convencidos de que te vamos a quitar unas cuantas migrañas.

¿Qué códec usar?: H.264, H.265, ProRes 422 o RAW

Como ya sabes por el curso gratis de Cómo usar tu cámara (puedes apuntarte aquí), los códecs son algoritmos de compresión que hacen que tengamos archivos de mucha calidad en muy poco peso. Pero esto tiene sus limitaciones de cara a la edición de vídeo y especialmente, en el etalonaje.

Por lo general, los códecs H.264 y H.265 son los que vas a ver en prácticamente todas las cámaras DSLR o Mirrorless que graban vídeo. Son unos códecs fabulosos por su relación calidad-tamaño, pero fueron pensados inicialmente para los renders finales, es decir, para entrega. Son códecs que permiten llevarnos el archivo en un pen drive para que el cliente vea el resultado final en el ordenador de su oficina o se lo mandemos por un enlace de WeTransfer o similar. Nos han insistido mucho: no son códecs para grabación. Ya lo dijo también Rubén.

Estos códecs, en los mejores casos, como en la Lumix GH5s o en la Fuji X-T4, tenemos un 4K de 60 fps a 400Mbps y 10 bit. Absolutamente brutal, pero ni de lejos es como grabar en ProRes y ya no os digo en RAW.

Los editores más antiguos se acordarán de que con Final Cut Pro 7 o Avid Media Composer, había que transformar todos los archivos de nuestra cámara a ProRes 422 (FCP) o DNxHD (AMC) para que pudiesen reproducir los archivos con facilidad. Premiere rompió esto y trajo con ello una auténtica revolución, pero hoy en día, aunque tengamos CPUs y GPUs potentes, sigue siendo muy costoso para nuestro hardware principal codificar y decodificar estos archivos.

Esto se debe a que H.264 y H.265 han tenido muchos desarrolladores diferentes, y a su vez, cada cámara trabaja de una forma distinta. DaVinci, tiene su propia gestión de estos dos códecs, una gestión bastante amplia y por eso es tan poderoso con ellos gracias a su aceleración por GPU en su versión de pago.

¿Qué necesita un ordenador para trabajar con estos códecs?

Una CPU multinúcleo, siendo el mínimo minimísimo un Intel i7 de 8 núcleos, tanto en torre como en portátil. El proceso de decodificación lo hace principalmente la CPU, aunque se apoye ligeramente en la GPU, por eso es aceleración y no procesamiento precisamente.

En cuanto a la GPU, el mínimo según BlackMagic es de 4GB de VRAM en portátiles y 8GB de VRAM en sobremesa. Nos afirman que, sin ninguna duda, DaVinci Resolve 16 debería funcionar con estas características. Si no te funciona y tienes que ir a la versión 15, quizá sea por eso. Pero también nos dicen que entre la versión 15 y la 16 no hay muchas diferencias en cuanto a rendimiento.

Hay quien se plantea utilizar dos GPU, una para la reproducción en pantalla y otra para el procesamiento gráfico, siendo esta última más potente. Esto se puede hacer mediante una conexión SLI en NVIDIA o CrossFire en AMD (revisa que tu placa soporte esto). Pero es un error muy grave.

Si realmente quieres aprovechar la potencia de dos tarjetas gráficas, deben de ser totalmente iguales, o por lo menos, el mismo modelo de distinto ensamblador. Por ejemplo, una RTX 2080 Super de MSI y otra de Asus. Aunque los ensambladores realizan diferentes modificaciones para mejorar el rendimiento, por eso es preferible que sea exactamente igual. ¿Por qué? Porque si una es menos potente, la mayor reducirá su potencia (valga la redundancia) hasta equipararse con su hermana pequeña. Así solo estarás tirando dinero y energía.

Lo mejor es que uses una sola GPU, tipo gaming con una VRAM mínima de 8GB y si tu presupuesto te lo permite, dos GPU exactamente iguales.

¿Qué ocurre entonces con ProRes y RAW?

ProRes 422 es un códec desarrollado por Apple. Sí, un códec, la CPU tiene que hacer el mismo proceso de codificar y decodificar que con H.264 y H.265, pero (un gran PERO) es un códec diseñado para la grabación y la edición. De hecho, las mirrorless más recientes (y no tan recientes) permiten la grabación en este códec mediante salida HDMI por monitor externo. ¿Por qué no lo incluyen internamente? Por el calor que genera fundamentalmente.

Este códec es mucho más pesado, pero porque está menos comprimido, así que el procesador va a trabajar mucho menos y por eso lo moverá mejor y eso que lleva mucha más información. Menuda paradoja, ¿eh?

Lo mismo ocurre con RAW, donde al igual que con las fotografías, son los datos del sensor en bruto, tal cual lo captura, donde quizá 3 minutos de vídeo sean 10GB de archivo (depende del RAW y de la cámara).

Si vamos a trabajar con archivos que vienen de cámaras como ARRI o RED, vamos a necesitar una máquina potente desde luego, pero el procesador no va a ser tan determinante, ni siquiera la GPU, sino más bien, el almacenamiento.

A más velocidad de almacenamiento, mejor gestionará DaVinci los archivos RAW

DaVinci usa constantemente la velocidad de nuestro disco duro, más que la GPU y la CPU. Si nuestro disco es mecánico (HDD) y de 5400 rpm, evidentemente no veremos la reproducción del archivo fluida. Pero quizá tampoco lo hagamos con un SSD conectado por SATA3.

En estos casos, lo mejor es ir a lo más rápido, los NVME o si usas discos mecánicos, utilizar configuraciones de RAID 0, 5 o 10.

Por resumirlo mucho, un RAID son un mínimo de dos discos que trabajan como uno solo en redundancia, donde además de sumarse su capacidad, se suma su velocidad (no en todas las configuraciones RAID). Esto es que, si tenemos dos discos de 2TB a 250Mb/s, funcionarán como uno solo de 4Tb a 500Mb/s. Podríamos hacer un artículo entero sobre RAID, pero si quieres saber más, clica en este enlace.

Toda esta configuración está genial en cuanto a edición y a etalonaje, pero ¿y si usamos Fusion principalmente? En este caso, ocurrirá como con After Effects, cuanta más memoria RAM, mejor.

Por lo general, todos los programas de postproducción que utilicen capas o nodos van a requerir RAM y poca latencia. Los efectos que aplicamos en los nodos de Fusion se guardan en la RAM, y así tanto CPU como GPU pueden acceder a esa información más rápido. Por tanto, cuanta más memoria tengamos, más podremos cargar nuestro proyecto de efectos para poder trabajar en tiempo real, sin parones o caídas. Así que el mínimo, según BlackMagic, sería 32GB.

Resumen y recomendaciones

Céntrate en averiguar una cosa: ¿cuál va a ser tu flujo de trabajo? Esa es la clave.

Un ejemplo: Si vas a hacer vídeos para Youtube, donde la mayoría lo va a ver por teléfono móvil y en el mejor de los casos por un monitor de ordenador de entre 100€ y 300€, ¿necesitarías realmente un monitor de 2000€ que reproduce el espacio de color de Adobe RGB al 100%, en HDR y una relación de contraste tan buena que la realidad te parecerá falsa?

Lo mismo ocurre con el hardware de tu máquina.

Ahora que vamos a hacer pruebas con la BlackMagic URSA Mini, vamos a aprovechar realmente el potencial de los ordenadores que tenemos en el equipo de RBG. Hasta ahora, pocas veces los ventiladores se han puesto a tope en la edición. Y es algo puntual, ¿o quizá no?

Nuestra recomendación es que empieces por algo sencillo. Afianza tus conocimientos y según vas creciendo como profesional, quizá acabes editando DCP para cine o publicidad donde sí necesites una máquina tan potente. Mientras tanto, tanto para DaVinci Resolve como para cualquier otro programa de edición, efectos y color, infórmate, piensa bien lo que vas a hacer e invierte con cabeza.

Te vamos a dejar aquí dos configuraciones que hemos hecho, una básica y otra más holgada.

Mínimo ideal

PC Guopotente para viajar en el tiempo

Si tienes más presupuesto, ve directamente a por una 2080Ti

Si estás pensando en montarte un PC, puedes recurrir a la serie RTX 3000 de Nvidia, que funcionan muy bien. También, van a llegar las nuevas memorias RAM DDR5. Todo depende, como bien sabes ya. Para un portátil, ten en cuenta las características que te hemos dicho a la hora de elegir.

Y aquí concluye este tutoblog completo sobre los requerimientos para un PC de edición con DaVinci Resolve.

Si ya dispones de un buen equipo o estás a punto de hacerte con un súper PC para editar tus vídeos, te recomiendo que te formes desde cero hasta llegar a un nivel avanzado con el curso de DaVinci Resolve. Si quieres llevar a cabo un proyecto audiovisual profesional y de calidad, Davinci es sin duda una gran opción.

La escuela
audiovisual
definitiva

Para vivir de tu pasión y
convertirte en un PRO

Te recuerdo que puedes dejar tus comentarios, recomendaciones o experiencias más abajo, en la sección destinada a comentarios. Será genial compartir experiencias acerca de los componentes de tu equipo y del flujo de trabajo que llevas en DaVinci.

¡Nos vemos en el siguiente Tutoblog!

Requerimientos para un PC de edición con DaVinci Resolve Leer más »

Cómo elegir equipo para trabajar con Premiere

A menudo nos llegan un montón de consultas técnicas donde, o bien nos preguntan si el ordenador que tienen es lo suficientemente potente para usar una versión de Premiere determinada, o tienen una duda técnica concreta sobre rendimiento donde nos especifican los componentes del equipo.

Pues bien, vamos a tratar de resolver esta duda de una vez por todas, por lo que en este tutoblog, te voy a explicar qué tipo de componentes necesita tu equipo para trabajar de forma eficiente con Premiere y sacarle el máximo partido.

Vaya por delante que nos referimos a especificaciones para PCs con Windows. Para iMac vamos a ser más rápidos: lo ideal es que para la versión actual de 2020 tengas uno del año 2017 como mínimo, ya no solo por lo que tiene la versión en sí, sino porque nos vamos a centrar en una máquina de alto rendimiento y Apple quizá no sea lo mejor para edición de vídeo actualmente.

Hay una cosa que hay que tener clara. Con la tecnología actual vamos a poder editar vídeo con cualquier ordenador, ya sea de una comunión, boda, cumpleaños o película, especialmente gracias a la creación de proxys, que van a facilitarnos poder trabajar a menores resoluciones y exportar a la resolución ideal.

¡Empezamos!

¿Cómo funciona Premiere con nuestro Hardware?

Premiere es una de las aplicaciones de edición de vídeo más extendida, de hecho, aquí aprovecho para compartirte el curso de edición de vídeo con Premiere, para que en 11h puedas dominarlo.

Edición de vídeo profesional
con Adobe Premiere

Optimiza tu producción de 0 a 100,
trabaja con fluidez y ahorra tiempo

Sin embargo, Premiere no es la aplicación más potente, puesto que no aprovecha al 100% nuestra GPU (tarjeta gráfica), como sí hace DaVinci Resolve en su versión de pago. Esto hoy en día es crucial, puesto que las tarjetas gráficas procesan con miles de núcleos la cantidad de píxeles, frente a los 6-10 núcleos de un procesador de gama doméstica o semiprofesional.

Premiere utiliza mucho más la CPU (procesador) a la hora de decodificar los archivos de vídeo y audio, lo que le genera mucha carga de trabajo y cuellos de botella. Pero tranquil@s, hay un truco que vamos a ver más adelante de cara a la exportación. Además, vamos a ver cómo minimizar el cuello de botella con el resto de los componentes.

Adobe ha publicado sus propias especificaciones mínimas y recomendadas. Como son muchas, puedes verlas en este enlace.

Sin embargo, si vamos investigando un poco por la web, vamos descubriendo que de nada sirve tener una tarjeta gráfica de 1000€ y un procesador de 300€; o tener CPU y GPU de última generación con 8Gb de RAM y un disco mecánico (HDD). ¿Por qué? Para hacerlo comprensible, la clave está en el equilibrio.

Si tenemos una RTX 2080 Ti (de las más potentes actualmente) con un i5 de 6ª generación, estamos “castigando” a nuestra GPU sin aprovechar todo su potencial. Ocurre lo mismo si trabajamos con archivos 4K de 400Mbps en un disco mecánico, puesto que los HDD no pueden ir a más de 250 Mbps conectados directos a placa por SATA3.

Así que es importante averiguar cuál es el bitrate de tu cámara. En Windows puedes hacer clic con el botón derecho del ratón sobre el archivo, pinchar en propiedades y en la pestaña detalles verás la tasa de datos:

Como ves, es un archivo 4K UHD, que perfectamente en un disco mecánico puede soportar sin bajones de fps durante su reproducción, pero si queremos movernos por el timeline rápidamente, experimentaremos todos esos tirones.

Hemos visto que necesitamos (de forma resumida) un equilibrio entre CPU, GPU, RAM y disco duro. Hay otro factor clave que es la distribución de la memoria. Vamos a resumirlo, pero antes, para quien no lo sepa, además de los discos tradicionales mecánicos (HDD), tenemos los discos sólidos (SSD) y discos PCI-Express (NVME). SSD significa Solid State Drive, muy populares y que han bajado muchísimo de precio afortunadamente. Son tan rápidos que llegan a la máxima velocidad de conexión SATA3 550Mb/s y, por ello, ya tienen un cuello de botella.

Los NVME significan Non Volatile Memory Express. Estos discos no se conectan a la placa base por puerto SATA3 como los otros, sino que lo hacen mediante puerto PCI-Express, el mismo puerto que las GPU. Por tanto, la velocidad es tal, que pueden alcanzar velocidades de 4500Mb/s por sí solos. Tras este resumen, según nuestra experiencia, esta es la forma ideal de distribuir la memoria:

Mínimo ideal

  • SSD 250GB o más para Sistema Operativo y programas.
  • SSD 1Tb o más para tus archivos de vídeo o fotos. Aquí crearemos los proyectos y los exportaremos.
  • HDD externo 1TB o más para backup.

Recomendado ideal

  • SSD 250GB o más para Sistema Operativo y programas.
  • SSD 1TB o más para tus archivos de vídeo o fotos. Aquí crearemos los proyectos.
  • SSD 250GB o más para caché. Todas las aplicaciones generan caché, que no son más que pequeños archivos que permiten que nuestros proyectos carguen más rápido, pero la suma de todos esos archivos puede ser inmensa.
  • HDD 2TB o más para guardar los proyectos terminados temporalmente (backup) o todas tus exportaciones.

Lo más eficaz (según presupuesto)

  • SSD 500GB o más para Sistema Operativo y programas.
  • NVME 2TB o más para vuestros archivos de vídeo o fotos. Aquí crearemos los proyectos.
  • SSD 250GB o más para caché. Todas las aplicaciones generan caché, que no son más que pequeños archivos que permiten que nuestros proyectos carguen más rápido, pero la suma de todos esos archivos puede ser inmensa.
  • SSD o NVME 120 GB o más para hacer las exportaciones aparte. Esto implica que distribuimos la carga de trabajo del disco principal sobre el que trabajamos los proyectos.
  • HDD 4TB o más para guardar los proyectos terminados temporalmente (backup).

Sabiendo esto y lo que recomienda Adobe, vamos a tener en cuenta el resto de los componentes desde el mínimo ideal hasta lo más eficaz.

Mínimo ideal

  • CPU: Intel Core i5 7600K.
  • GPU: NVIDIA GeForce GTX 1070.
  • RAM: 16GB CL16. CL es la latencia, cuanto menor sea el número, mejor, puesto que tardará menos tiempo en comunicarse con el procesador, pero claro, será más caro.

Recomendado ideal

  • CPU: Intel i7 9700K / AMD Ryzen 7 3700X.
  • GPU: NVIDIA GeForce GTX 1660 / GeForce RTX 2070 / AMD Radeon RX 5700 XT.
  • RAM: 32GB CL16 o menor.

Lo más eficaz (según presupuesto)

  • CPU: Intel i9 9900K / AMD Ryzen 9 3900X.
  • GPU: NVIDIA GeForce GTX 2070 Super / GeForce RTX 2080 Ti.
  • RAM: 32GB CL12 / 64GB CL14 o menos.

Esto son solo nuestras recomendaciones basadas en nuestra experiencia y teniendo en cuenta un ordenador para poder renovar cada 5 años de media. Lo bueno de hacerte tu propio PC, es que puedes ir actualizando los componentes en función de lo que vayas necesitando y, por supuesto, ayudando a tu bolsillo a que solamente la inversión principal sea la más grande y después solo haya que hacer “pequeñas inversiones”.

Respecto a las placas base, vamos a tener en cuenta algunas cosas:

Normalmente, en la gama de procesadores de Intel, suelen valernos durante 2 generaciones de procesadores. Esto quiere decir que cada 2 años se renueva el Socket (zócalo donde se encaja el procesador). Por tanto, debemos tener en cuenta la generación del procesador y el Socket de nuestra placa base, ¡no vaya a ser que no nos sirva!

El rango de precios según los procesadores que hemos puesto está entre 200-500€. La diferencia va a ser la cantidad de conexiones que tenga la placa fundamentalmente y todo lo que pueda soportar en cuanto a memoria RAM.

Si queremos irnos a otra gama más profesional, estaremos creando una Workstation, donde vamos a utilizar la serie X de Intel o la de Threadripper de AMD. Estos procesadores son de 12 núcleos en adelante, siendo el Threadripper 3990X de AMD de los más potentes actualmente. Pero la gama doméstica de AMD ya ha llegado a los 12 núcleos.

¿Más núcleos es igual a más potencia? Teóricamente sí, pero el rendimiento real es otra cosa que no corresponde a este tutoblog. Si quieres leer especificaciones, Pudget Systems tiene estudios constantes y actualizados de hardware tanto para Premiere como para After Effects, DaVinci, etc.

A su vez, con las tarjetas gráficas entramos en la gama QUADRO o TITAN de NVIDIA, pero no son realmente necesarias salvo que trabajes desde un servidor conjunto. Si no, estarás “tirando” dinero y te sobrará potencia a raudales que no aprovecharás. Además, muchas de estas tarjetas realmente se usan para inteligencia artificial y no tanto para creación de contenidos.

Algunos trucos para exportar más rápido

Para el primer truco, tienes que acceder a la BIOS de tu PC. Normalmente, cuando arrancas el ordenador te aparece una pantalla de carga o bien con el logo de Windows o con el logo del fabricante de tu máquina. En ese momento, pulsando la tecla retroceso o F2 vas a acceder a la BIOS.

IMPORTANTE: Cada BIOS es diferente según el fabricante y las actualizaciones. No cambies nada si desconoces exactamente dónde está todo lo que te voy a indicar, puesto que solamente ganamos 1 o 2 minutos de tiempo al exportar. En este caso, la BIOS es de una placa Gigabyte Aorus Elite Z390. Para desplazarte, es mejor usar el teclado con las flechas de dirección, Enter y ESC en vez del ratón.

En los Ajustes de codificación (pestaña de vídeo), lo normal es que no haya opción de cambiar la barra de rendimiento. Si te deja cambiarla, prueba a ver qué pasa, porque puede que te salte un mensaje de que tu sistema no admite la aceleración por hardware con la configuración actual.

Reinicia el ordenador y pulsa F2 en cuanto aparezca el logotipo de Windows o del fabricante del pc hasta que entres en la BIOS. La BIOS de nuestra placa tiene este aspecto:

Si no estás en el Modo Avanzado, pulsa F2 para acceder a él. Mira bien en tu BIOS qué botón es el tuyo.

Puedes saltarte este paso si tu idioma está en español. Si no, ve a System Info y en System Language selecciona el español. Aún así, puede que tu firmware de BIOS no esté 100% traducido.

Una vez hayas terminado, ve a la pestaña Settings y después a IO Ports.

Dentro, en la opción de Internal Graphics, selecciona Habilitado. De esta forma, vas a habilitar los gráficos de la CPU junto con los de la GPU, que al exportar incrementará ligeramente el rendimiento. Esto se da siempre y cuando tu procesador tenga gráficos integrados, la serie X de Intel, por ejemplo, no los incluye.

Para salir de la BIOS, desplázate a la sección Guardar y salir y ahí selecciona Guardar y salir de la configuración. ¡Y listo!

Ahora te aparecerá habilitada la codificación por aceleración de hardware.

Para el segundo truco, si tu tarjeta gráfica es NVIDIA, tienes que descargar el controlador Studio. De esta forma, se va a aumentar el rendimiento tanto en la exportación como en la edición. Para descargarlo debes ir a la web oficial de NVIDIA. Ahí, selecciona tu modelo y al final, donde pone “tipo de descarga” selecciona Controlador Studio. ¡Lo instalas y listo!

Y aquí concluye este tutoblog completo sobre cómo elegir equipo para trabajar con Premiere.

Ahora que ya sabes lo que necesitas, aquí te dejo también un enlace para que puedas calcular la potencia de tu fuente de alimentación.

La escuela
audiovisual
definitiva

Para vivir de tu pasión y
convertirte en un PRO

Te recuerdo que puedes dejar tus comentarios, recomendaciones o experiencias más abajo, en la sección destinada a comentarios. Será genial compartir experiencias acerca de los componentes de tu equipo de trabajo.

¡Nos vemos en el siguiente Tutoblog!

Cómo elegir equipo para trabajar con Premiere Leer más »

Los mejores dispositivos de almacenamiento ultrarrápido

En este tutoblog, te voy a hablar del almacenamiento de los archivos de fotografía y vídeo, y de cómo realizar una gestión eficiente por medio de una serie de dispositivos. Este es un tema muy pedido por muchas personas de la comunidad Guoker, así que te animo a prestar mucha atención.

El tipo de almacenamiento que tengamos influye directamente en nuestra eficiencia y comodidad al trabajar. A menudo, vamos a necesitar guardar grandes cantidades de materiales, que suelen pesar bastante. Y si no tenemos unos dispositivos preparados para leer y sobrescribir información, nos va a ralentizar muchísimo en la edición.

Yo también he estado utilizando los típicos discos duros externos baratos, como todos. Pero, a medida que mi volumen de trabajo iba creciendo, me di cuenta de que no eran eficientes para lo que necesitaba.

La escuela
audiovisual
definitiva

Para vivir de tu pasión y
convertirte en un PRO


Por esa razón, ahora te voy a contar de manera sencilla los dispositivos que estoy usando actualmente, y que me permiten almacenar todo lo que quiera, sin preocuparme por la velocidad o por saturar mi equipo de trabajo.

¡Comenzamos!

El NAS (Network Attached Storage)

Básicamente, un NAS es un dispositivo de almacenamiento.

Este aparato ofrece grandes cantidades de almacenamiento, ya que en su interior podemos incorporar varias unidades de discos duros.

Lo bueno del NAS es que no depende de nuestro ordenador para funcionar, sino que se conecta a través del cable de red, a través de un router, para hacer las veces de servidor remoto o con conexión USB Thunderbolt 3.0.

Para mí ha sido la gran incorporación en mi equipo de trabajo. En concreto, estoy utilizando este NAS TVS-672XT de Qnap.

Se compone de 6 discos duros Western Digital de 4 TB cada uno, por lo que dispongo de 24 TB (aunque podrían ser 60 si cada disco tuviera 10 TB), pero el espacio real usable depende del RAID que configuremos.

A mí me encanta, porque me permite editar y trabajar sobre él sin ningún problema. Es como tener un miniordenador, con su propio procesador, RAM y demás, donde puedes tener almacenamiento para años, y que no se verá alterado por los problemas que puedas tener en tu ordenador.

Y lo mejor es que lo tengo en RAID 5. Seguro que te estás preguntando, ¿qué es eso?

No te preocupes, a continuación lo vemos.

¿Qué es una RAID?

Para no meterme en explicaciones muy técnicas, básicamente es un sistema que permite que varias unidades de almacenamiento funcionen como si fueran una sola.

En mi caso, mi NAS tiene 6 discos duros que operan en conjunto. Dependiendo del número que tenga la RAID, encontramos unas funcionalidades u otras.

Por ejemplo, existen RAIDs que, a pesar de funcionar con varios discos duros a la vez, no protegerían la información si alguno de ellos fallase. Pero de ahí podemos pasar a la que yo tengo, el RAID 5, que creo que es la mejor opción para mi caso.

¿Por qué?

Pues porque la información que tengo en cualquiera de mis 6 discos duros está totalmente protegida al tener un disco duro de redundancia. Es decir, aún siendo posible que pudiera fallar uno de ellos, no perdería absolutamente nada, porque está respaldado en los otros 5. Podría recuperar los archivos sin problema, lo que da una seguridad y una tranquilidad tremendas.

Otra ventaja es que me ofrece una velocidad de lectura de 5x, lo que es una diferencia muy grande respecto a los dispositivos convencionales.

También tenemos la opción de crear nuestra propia nube a través de la conexión Ethernet.

Y si tienes un equipo (personal) de edición, como yo en la empresa, un NAS puede ahorrarte mil quebraderos de cabeza.

¿La razón?

Puede funcionar como una unidad virtual, o lo que es lo mismo, como un iSCSI.

¿Qué es un iSCSI?

Pues, de manera resumida, es un protocolo para la comunicación entre dispositivos. En nuestro caso, el poder crear una unidad virtual es similar a tener nuestro propio mini servidor. Y no solo para mí, sino para las personas que editan en el equipo.

La ventaja de esto es que los archivos se quedan almacenados en esa unidad virtual, pudiendo acceder cualquiera de nosotros, sin importar el lugar en el que vivamos.

Así, no hace falta que todos tengamos los archivos originales para editar, sino que conectándonos a la red por el NAS y gracias a conexiones rápidas como la fibra óptica, podemos trabajar directamente sobre él. Incluso en grandes empresas utilizan este modus operandi, para que los editores o diseñadores se puedan conectar desde cualquier puesto de trabajo.

Pero hay un ligero hándicap a la hora de usar este tipo de NAS. Nada, pequeños detalles.

Y es que cuando necesito editar de forma inmediata o sobre la marcha con nuevos archivos, el NAS tarda un par de minutos o tres en iniciarse y funcionar. Entonces, si lo tengo que usar muy a menudo, se hace un poco incómodo.

En cambio, lo que utilizo es un G-RAID con dos discos duros en RAID 0.

Tengo una velocidad de lectura y escritura muy rápida y se pone en funcionamiento en unos 10 segundos.

Lo que yo hago es utilizar este G-RAID para mis trabajos habituales y cuando he acumulado mucho material o se han llenado los discos, vuelco la información en el NAS.

Y aquí concluye este tutoblog completo sobre los mejores dispositivos de almacenamiento ultrarrápido. Espero haberte aclarado bastantes dudas sobre lo que es un NAS o una RAID y para qué sirven.

Si tú también tienes grandes flujos de trabajo o incluso trabajas con más personas, estoy seguro de que es la mejor opción y que te enamorarás cuando lo pruebes. De hecho, si te interesa conocer más detalles sobre cómo se trabaja con un NAS, te recomiendo que accedas al siguiente tutoblog: Cómo almacenar archivos en un NAS (y crear tu nube).

Por último, cabe mencionar que como aspecto negativo, estos aparatos no tienen un precio bajo, por lo que vas a necesitar un poco de presupuesto.

La escuela
audiovisual
definitiva

Para vivir de tu pasión y
convertirte en un PRO

Te recuerdo que puedes dejar tus comentarios, recomendaciones o experiencias más abajo, en la sección destinada a comentarios. Será genial compartir experiencias acerca de cómo gestionas los archivos que extraes de tu cámara.

¡Nos vemos en el siguiente Tutoblog!

Los mejores dispositivos de almacenamiento ultrarrápido Leer más »

Carrito de compra
Scroll al inicio